La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, considera que el adelanto electoral obliga a definir una nueva hoja de ruta para reforzar los servicios públicos y dignificar las condiciones laborales de sus trabajadores/as.
Desde el respeto a los resultados de las urnas y a la decisión del presidente del Gobierno de disolver las Cortes, CSIF entiende que las diferentes fuerzas políticas deben abrir un proceso de reflexión y poner encima de la mesa nuevas medidas para afrontar los retos y las necesidades de España.
Nos referimos fundamentalmente al alza de los precios, la subida de las hipotecas, carestía de la vivienda, de la energía, el deterioro de la calidad en el empleo y el empobrecimiento generalizado de las familias españolas, fundamentalmente las clases medias, las personas más desfavorecidas, los jóvenes y las mujeres.
En el ámbito de las administraciones públicas, es evidente el deterioro de los diferentes ámbitos como son la Administración General del Estado (Seguridad Social, SEPE, Inspección de Trabajo, etc), la sanidad, la justicia o la educación, así como el deterioro generalizado de las condiciones laborales de trabajadores y trabajadoras, que han jugado un papel esencial en los últimos cuatro años, con la pandemia y la crisis económica, en la atención a la ciudadanía.